La pandemia se deja sentir en las ventas de pollo

27/01/2021
  NOTICIAS DEL SECTOR

La pandemia está teniendo serias repercusiones en buena parte del sector primario español. Uno de ellos es el de los productores de pollo, que están sufriendo cuantiosas pérdidas por el descenso en el consumo, aseguran desde la Unión de Pequeños Agricultores (UPA). La entidad reclama a la distribución que apueste claramente por las producciones españolas y rechace la carne importada que llega a bajo precio.

Según UPA, son varios los motivos que justifican la situación complicada que están atravesando las explotaciones que se dedican a la cría de pollo en España.  Aunque el consumo de pollo en los hogares es mayor, se está produciendo una gran caída de ventas por la ausencia de turismo y el bajón en la hostelería. Debido a esta menor venta de pollo, los avicultores tienen que espaciar más las crianzas, criando así menos animales e infrautilizando la capacidad que tienen sus granjas. Además, el impacto del COVID-19 ha ocasionado precios altos en el sector, lo que ha provocado que haya aumentado el precio de los costes fijos para los granjeros.

No obstante, según Rabobank, aunque el COVID-19 seguirá perturbando los mercados avícolas en 2021, en la segunda mitad del año, cuando la pandemia del COVID-19 estará más controlada, se llegará a una cierta recuperación en la restauración y hostelería, aunque aún seguirán pesando las dificultades ocasionadas por la pandemia en los mercados.

Ante esta situación, la Unión de Pequeños Agricultores hace un llamamiento a la distribución para que adquiera «un compromiso con el pollo español», rechazando las importaciones de pollo congelado a bajo precio. 

Pero, a pesar de la crisis internacional provocada por la pandemia del COVID-19, la industria avícola podría ver algunas oportunidades que también han surgido en medio de la incertidumbre que atraviesa el sector. Es el caso, por ejemplo, del servicio de entrega a domicilio en la distribución de carne y huevos de pollo para los consumidores finales, el cual ya se estaba implementando de manera incipiente dentro de las empresas avícolas, y que ahora tiene un momento clave para demostrar su valía y crecer. El teletrabajo es otra de las medidas que ha llegado para quedarse, aunque las empresas de este sector se muestren reticentes.

Es hora de promover los productos avícolas, ya que la compra producida por el pánico ante la pandemia, refuerza el gran posicionamiento que los huevos y el pollo tienen en la mente de los consumidores como alimentos básicos o como ingredientes fundamentales en sus dietas.

Las perspectivas para la avicultura mundial en 2021 son desafiantes, especialmente en el primer semestre. Después de la gran disrupción en 2020 debido al COVID-19, la industria se enfrentará a retos adicionales en 2021, siendo los precios de la carne de ave los más afectados debido a la alta demanda de la misma, que se viene produciendo en el mercado.